La maternidad y la paternidad abren un mundo completamente nuevo. Las madres y los padres primerizos deben aprender un sinfín de cosas de manera acelerada y tienen que familiarizarse con productos que, hasta entonces, les resultaban ajenos.
Conocer cuáles son los mejores biberones, en este marco, resulta muy importante. Todos los pediatras coinciden en afirmar que la leche materna es el mejor alimento para un bebé; como complemento o como reemplazo cuando existe algún inconveniente que impide el amamantamiento, en tanto, aparece la leche de fórmula como una aliada muy valiosa. Por eso los biberones son claves en cualquier casa donde hay niños menores de un año y medio.
Un biberón, llamado mamadera en países latinoamericanos, es una pequeña botella de plástico, cristal u otro material que dispone de una tetina para la succión. La tetina, por su parte, es una pieza de goma cuya apariencia es similar a la del pezón: al succionar la tetina, el pequeño tiene acceso al contenido del biberón.
En los biberones puede almacenarse y dispensarse leche materna o leche de fórmula. Pero también sirven para el suministro de agua.
No es sencillo elegir los mejores biberones porque muchos de estos utensilios apuntan a satisfacer necesidades particulares o específicas. Así, encontramos biberones para recién nacidos y biberones anticólicos, por ejemplo. También es posible diferenciar los biberones según su capacidad.
En cualquier caso, no hay que olvidarse de esterilizar el biberón y la tetina antes de cada toma en el caso de los bebés más pequeños y regularmente cuando son más grandes. Siempre es necesario lavarlos bien con agua y jabón para que no queden restos de leche y el adulto además debe higienizarse las manos al alimentar a su hijo para minimizar el riesgo de infecciones.