El cine argentino tiene sus orígenes en los finales del siglo XIX, aunque no fue hasta el siglo XX cuando comenzaron a pisar fuerte las películas de producción nacional. Títulos como «Nobleza gaucha» o «Un romance argentino» fueron tan populares que en poco tiempo el cine argentino comenzó a ocupar un lugar de cierto prestigio en el continente. Tanto es así que se cree que es uno de los países latinoamericanos con más salas de cine y que destina más presupuesto al desarrollo cinematográfico.
La época dorada del cine argentino comenzó en los años treinta del siglo XX, cuando José Ferreyra publicó la primera película con sonido del país, «Muñequitas porteñas». Posteriormente largometrajes como «Por una Argentina grande. justa y civilizada», «Tango» y «Los martes, orquídeas». La mayoría de los guiones tenían un alto contenido político, pero también se desarrollaron muchas películas del género erótico e infantil.
Como todas las producciones, el cine se vio afectado durante los setenta por la llegada de la dictadura al poder. Muchos creativos del sector tuvieron que exiliarse debido a sus ideas contrarias a la violencia del sistema. Asimismo muchos de los programas cinematográficos fueron suspendidos y el congelamiento del proyecto de ley de cine llevó a la paralización de las actividades en el sector.
Los ochenta traerían libertad al país y renovación para el cine. Desde entonces el cine argentino ha ido creciendo y convirtiéndose en una industria de referencia en el panorama hispanoamericano. En las últimas décadas se han realizado muchas coproducciones entre Argentina y España, que han ayudado con el crecimiento de la industria en ambos países.
A continuación te presentamos las mejores películas argentinas.